En el corregimiento de Zaragoza, en Cartago, Valle del Cauca se construye el sueño de 24 familias de bajos recursos económicos, quienes se unieron para edificar su casa propia.
Con la orientación de la Corporación Diocesana Pro-Comunidad Cristiana, esta nueva comunidad ha comenzado la creación de una urbanización a través del diseño participativo, una propuesta de vivienda de interés social, a través de la cual buscan alcanzar estabilidad.
Este proyecto se realiza en la modalidad de autoconstrucción, una modalidad que fue implementada por la Corporación Diocesana en sus inicios, convirtiéndose en un éxito a nivel nacional, esta forma de construcción se había perdido con el tiempo pero fue recuperada ejecutando un proceso participativo, más fácil de operar para las familias, lo que permite que cada uno de los integrantes de las mismas se involucren con la cimentación de sus sueños.
Otro aspecto positivo es el respeto por el entorno y la consideración por el medio ambiente del corregimiento.
De la misma alianza de estos futuros vecinos han nacido propuestas para realizar actividades todas las semanas con el objetivo de recolectar fondos económicos que permitan aliviar los costos de construcción, esta es una forma de vincularse activamente que promete mas unión a nivel comunitaria y sentido de pertenencia por su urbanización.